
domingo, 28 de septiembre de 2008
Método

sábado, 27 de septiembre de 2008
martes, 23 de septiembre de 2008
El pulmón vacilante

Entonces hago girar los paneles y aparece la voz de Lucas gritando que me apure. Mi cuerpo lo veo desde afuera, primero desde la posición de Lucas y después, como si yo fuera parte del metegol o un pedazo de suelo, me veo llegar desde abajo, un pie que hace sombra, que casi me pisa. Yo juego atrás y cada tanto meto unos bombazos bárbaros desde el palote despintado que hace de arquero. Mi táctica es poner a los cuatro defensores en degradé, permitiendo un tiro dificilísimo y colocando al arquero tapando el único espacio libre por donde podría meterse la pelota. Soy bueno jugando atrás. No me sobra técnica pero tengo mis mañas. Tampoco hablo mucho ni canchereo cuando ganamos...
viernes, 19 de septiembre de 2008
miércoles, 17 de septiembre de 2008
Santa Teresita
Nos cubrimos de cremita solar
todos los poros
con un amor de madre que se esparce
desde la nariz hasta el pecho
todos los refugios ínfimos
cada felpa del cutis
para no caer
en orificios de leche.
martes, 16 de septiembre de 2008
Contratapa Universitaria
Alrededor de un año atrás comenzaron a llegarme boletines de la Facultad de Ciencias Sociales: noticias, decisiones del consejo, marchas, fechas de asamblea, talleres para el armado de tesis, congresos sobre periodismo y otras yerbas. En realidad, antes de comenzar con Letras, cursé dos materias de Ciencias de la comunicación: antropologia cultural e historia media social general. Lo que no explica, claro, de donde sacaron mi cuenta de mail. Lo que cuelgo abajo son las palabras de Pablo Alabarces , docente de Sociales:
(...)
"Doy clase en aulas espantosas, sin calefacción ni ventilación; los techos no se caen, pero pareciera que podrían hacerlo; no se pueden nombrar nuevos profesores, porque no les pagarían –todavía hay varios que no lo han conseguido jamás–; hemos armado un posgrado de lujo, entre gratis y muy barato, pero no recibimos un solo peso para solventarlo y así hacerlo gratuito, como es en Brasil, sin ir más lejos; los empleados administrativos ganan miserias y son muchos menos de los necesarios –y puedo afirmar, porque dirijo hace casi cinco años una oficina universitaria, que no se trata de ñoquis ni de nada por el estilo–. Los compañeros y compañeras que trabajan conmigo en la cátedra arañan los $600 mensuales, y se matan para dar clases espléndidas, dignas de admiración y respeto por sus estudiantes (que los adoran). Pero lo deben hacer muchas veces y en muchos lados, para así armar sueldos decentes.
Y a pesar de todo eso, la UBA sigue siendo la segunda o tercera universidad de América Latina y una de las más prestigiosas del mundo, la que produce un porcentaje abrumador de toda la ciencia argentina. Un verdadero milagro, que el esfuerzo de las sucesivas autoridades políticas por desfinanciarla no ha conseguido destruir. El milagro consiste en el orgullo tenaz de saberse parte de una tradición democrática inaudita: somos el único país del continente donde un hijo de las clases populares podía llegar a doctorarse en su universidad pública, gratuita y cogobernada. Una tradición democrática que tiene las dificultades propias de la lucha política –que la vuelven conflictiva, pero también más democrática que varias provincias sofocadas por el feudalismo–; y una tradición de autonomía que también garantiza que la producción científica sea minuciosamente independiente, solo deudora del rigor científico –pongámoslo así: ni le pedimos permiso a Clarín, ni le debemos pleitesía al PJ o a Macri–.
Con poca plata –las cifras necesarias son ridículas para el superávit fiscal y la recaudación impositiva– todos los problemas se resuelven. La movilización de docentes y estudiantes garantiza que nadie se la robe: será necesariamente plata bien usada. La pregunta del millón es, entonces, si la universidad pública, uno de los grandes orgullos de este país, le importa algo a este Gobierno. Y a toda la sociedad, que critica los paros y las marchas hasta que llega el día de la graduación de sus hijos e hijas. Ese día, entonces sí, se emocionan recordando al abuelo analfabeto."
Pablo Alabarces
lunes, 15 de septiembre de 2008
Pliegues desplegables

La pequeña edición de autor que en su versión definitiva estará, el próximo finde, en la feria del libro cordobesa. Gracias a Romina y a todo el aparato desplegable por la invitación!
viernes, 12 de septiembre de 2008
Downtown train
martes, 9 de septiembre de 2008
lunes, 8 de septiembre de 2008
Una pelota cuesta abajo
Esa vez clavé la mirada
en el bajo envuelto en niebla
y me quedé un rato largo
colgado de eso verde y blanco
hasta que se me humedeció
el pelo. Después me di vuelta
para encarar la subida.
Ahora a veces me hago
el loco, pierdo el corazón,
me quedo callado con
la vista clavada en un punto sólido,
hasta que me saca una puteada:
se me cae el cigarrillo,
el cenicero, los pensamientos se desparraman
en el piso de tierra,
en la alfombra...
entonces vuelvo
para hacer un comentario,
para tranquilizar a mis queridos.
Pero sé quien soy, lo sé, cierro
los puños, me revuelco,
me arrastro, rompo un plato, un libro.
No puedo parar el llanto de una mujer,
no puedo parar de llorar,
nunca tuve huevos,
estoy triste ¿Cómo anda la cosa
por ahí? ¿Estás bien? Te quiero mucho.
Quisiera quedarme tranquilo, preparar
el mate, llamar por teléfono, no pensar,
no despabilarme, son órdenes:
levanto la vista
miro el cielorraso
cuento los pisos de los edificios las ventanas
la cantidad de gente en una esquina
en un piquete
en un colectivo
28 sentados
22 parados
el chofer.
Y me pica el cuero,
me molestan los mosquitos,
los bichitos colorados,
el zumbido de los semáforos
para ciegos,
el olor a pasto,
con el primer rocío
me dicen hola
feliz cumpleaños y me besan.
Entonces bajo la vista
para mirarme el café con leche,
el olor a ropa nueva.
Me gusta pensar que soy
una pelota cuesta
abajo en una calle de tierra
en una mañana fresca y clara.
Me cuesta pensar que soy un pensamiento.
Damián Rios
jueves, 4 de septiembre de 2008
Pasión por lo real
Yo me hice tatuar el título en el pecho al empezar. Me decía, si todos los días me levanto y veo eso en el pecho, no quiero tener que explicar algún día: "No, iba a ser el título de una novela pero quedó en nada". Fue jurarme que la terminaba.
miércoles, 3 de septiembre de 2008
lunes, 1 de septiembre de 2008
Flopa

El viernes fui a escuchar a una de mis cantantes-compositoras preferidas en
Abandoná:
abandoná tu carga
fijate, todo está apoyado sobre el suelo
y hacé el lugar que haga falta
en vez de armarte una valija de viajero
para llevar lo que vale menos que su peso
así las cosas fueron hechas para ser tenidas
hechas para ser dejadas
no hay que perder la calma
si empantanados en la suerte nos encuentra
la soledad es un ancla
tan hondo se ha clavado a dormir en el lecho
no hay que olvidar
que no hay forma de vivir sin amar
así las cosas fueron hechas para ser tenidas
hechas para ser dejadas