Buceando en archivos de word descubrí un cuento que habré escrito por el 2002; intenté limarlo un poco y quedó esto: un relato juvenil y fulbolero sobre el último campeonato que ganó Racing:
De a uno le contaron a la bruja sobre las aventuras vividas en rededor del Cilindro, de los goles que gritaron durante horas, aun mas, de todos los hombres que sufrieron por décadas la repetidas derrotas, de la abuela narigona que cocina ravioles enfrente del estadio, de aquella vez qué un tipo le arrojó La perla de John Steimbeck al Piojo López por no pasar la redonda cuando debía.
– Espero que la haya leído, es una gran novela – dijo Domínguez ya entrado en confianza. Hablaron durante horas. Repitieron una y otra vez que la vida valía la pena por un cacho de pasión y, aunque fueran opuestos, no merecían sufrir el interminable tormento de semejante brujería.
– Hagamos un trato – dijo entonces la mujer.
Afuera comenzaba a llover.
2 comentarios:
Este es el mío, Martín! Ya te lo dije muchas veces. Todavía lo tengo entre mis preciosuras. ("My precious... my own precious...")
Como olvidarme Viviana?! Y que bueno cruzarte por esto pagos! Beso!
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