Mi madre tiene un Jesús. Un jesús volador que se compró en once. Vení me dice, lo tenes que ver. Nos dirigimos al living y ahí me muestra al cristo, es de aluminio y plástico brillante, tiene una hélice en la cabeza y se maneja de control remoto; las funciones de vuelo son llamativamente sorprendentes, se puede elegir entre diez velocidades distintas, mamá elige la más baja y Jesús vuela en círculos lentamente por el living. Tal vez así, ella siente, que todavía puede controlar a alguien hasta hacerlo estrellar.
El tipo que escribe estas cosas es un grosso mal. Les voy a dejar el link de su blog por si quieren leer más: www.tengounlinyerabajolacama.blogspot.com
3 comentarios:
ah, no. este man se zarpa!
Se zarpa mal che, muy bueno viste?
me gustó tu blog, te agregue a msn,
MUY BUENO, los campos y gabo!
Publicar un comentario