miércoles, 6 de octubre de 2010

La partida

Ordené sacar mi caballo del establo. El criado no me comprendió. Fui yo mismo al establo, ensillé el caballo y monté. A lo lejos oí el sonido de una trompeta, le pregunté lo que significaba aquello. Él no sabía nada, no había oído nada. En el portón me detuvo para preguntarme:
- ¿Hacia donde cabalga el señor?
- No lo sé - respondí - Solo quiero irme de aquí, solamente irme de aquí. Partir siempre, salir de aquí, sólo así puedo alcanzar mi destino.
- ¿Conoce, pues, su destino? - preguntó él.
- Sí - contesté yo-. Lo he dicho ya. Salir de aquí, ese es mi destino.

Franz Kafka

2 comentarios:

Nadia dijo...

yo también me quiero ir.
busco mecenas con mucha plata pero
que no le importe demasiado
la plata generoso de más de 60 años (no ha lugar para malentendidos en el lavarroupas bueno eso no sé no se sabe por ahí bien ehm viste?)
mi destino es un sobrecito con billetes que nunca se satisface y me sigue diciendo que no le alcanza para ser ningún destino. matenlón.
ahora que lo pienso ¿hacia donde cabalga señor? llevemé señor espere ay me caí señor no se vaya
por
favor
ay se fue

Gabriela dijo...

Más que salir, siempre es andar.