jueves, 22 de mayo de 2008

El remisero llorón

Hace uno o dos sábados me tomé un remis hasta el centro de Ramos. Así conocí al remisero llorón: un gordito treintañero, de barba pelirroja, que iba escuchando la radio de Jesse James. Hablamos dos o tres pavadas: me preguntó para donde salía y un par de cosas sobre un barcito que clausuraron hace poco por San Justo. Promediando el viaje empezó a sonar un temita de la santa Gilda. El gordo subió el volumen y manoteo un pucho. Me acuerdo que por la secundaria tenía una preceptora muy linda con la que bailé un rato con esta canción. El remisero iba tarareando y en un momento me di cuenta, no se bien como, que estaba haciendo fuerza para no largarse a llorar. Antes de bajar me dijo “¿Que querés? Esta canción me hace mierda”.

4 comentarios:

irina sufemo dijo...

aka las canciones peligrosas, que hacen llorar: para mí es "desde q te perdi", de johanssen.

Te cuento Martín que volví con mi novio, y él está aquí, en mi país. Yo, honestamente, no sé donde estoy, dudo un poco que aqui, en mi país.

Martín dijo...

Yo no sé si tengo canciones que, literalmente, me hagan llorar. "Desde que te perdí" es maravillosa Irina.

Con respecto a lo que me contás, me queda la duda si estás o no contenta, sobre con tus palabras finales...

Anónimo dijo...

Naaa! Lo amé.

Martín dijo...

Seguro que en San Michel no te cruzás con estos remiseros llorones ¿no Lu?
La canción, obvio, era esa que dice "No me arrepiento de este amor/aunque me cueste el corazón/amar es un milagro..."