Una vez que iba en tren para el oeste tuve una visión, empecé a ver todos los fondos de las casas, la mayoría de ellos con una pileta, y ahí llegué a la conclusión de que los seres humanos todavía somos anfibios, a mi la lluvia me redime, un vaso de agua me hace sentir mejor, las piletas me ilusionan, a la noche los chorros de agua que caen en los tanques me tranquilizan, me proporcionan imágenes ligadas a lo adánico, y ni que hablar de la sensación de ver correr el río, ahí me siento muy tranquilo.
Acá la entrevista completa
5 comentarios:
Dios santo lord, qué profundos tus pensamientos. Comparto, salvo la lluvia obviamente, que la odio con todo mi corazón.
Yo, cuando voy caminando por la vida, voy pensando: "y las botas moradas, me van con los pantalones nuevos?" o cosas como "a mi novio le gustará mi sombra de ojos verde? Poco me importa porque a mí me encanta".
Lo sé, soy una persona superficial.
No te preocupes que yo también Luisa, por eso me cope cuando leo reflexiones como las de Durand, jaja.
El agua. La lluvia, el chorro tranquilizante.. sí, definitavamente.
Y creo que también voy caminando pensando en sí a mi novio le gustará algo de lo que llevo puesto, pero suelo pisar los charcos o saco la mano por la ventanilla del bondi cuando llueve.
Mi beso dominguero.
interesante entrevista. Casi no la leo porque por alguna razón me los confundo a los Danieles Durand y Link, y este último no me cae nada bien. Ahora ya los diferencié.
Yo tampoco fui a ver a Radiojed.
Encima me dicen que tocaron Creep, por lo menos ya pasó todo. Vos le tenés algún tipo de fobia a Link...
Ro: dejaste un beso de domingo un martes, eso es peligroso...
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